15 de julio de 2010

EL ESTADO CONSTITUCIONAL Y DEMOCRÁTICO DE DERECHO Y SU PROCESO DE CONSTITUCIÓN

EL ESTADO CONSTITUCIONAL Y DEMOCRÁTICO DE DERECHO Y SU PROCESO DE CONSTITUCIÓN

Por Katherine Castro Yacchi*


El reto de la ciencia jurídica en el marco de un Estado Constitucional de Derecho es el de compatibilizar los principios de defensa y efectivo ejercicio de los derechos fundamentales de los ciudadanos con los principios sectoriales de cada uno de los ámbitos de actuación estatal.

Es importante señalar que la forma de organización estatal conocida como Estado Constitucional y Democrático de Derecho constituye el último estadio de una evolución en constante desarrollo. Evolución en la que tanto la noción de la persona humana y sus derechos han ido configurándose bajo concepciones diferentes.

Y si hablamos de una evolución es pues necesario hacer una breve revisión de los diferentes tipos de Estados antecesores al Estado Constitucional y Democrático de Derecho para una mejor comprensión de éste último. Y ¿ Por qué es importante señalar la distinción de dichos Estados antecesores ? Porque aunque la distinción entre los diversos tipos de Estado pueda parecer un ejercicio teórico, sin relevancia práctica para el ciudadano no entendido en ciencia política ni jurídica; creemos que ésta sirve para dotar de contenido a las normas del sistema jurídico y ordena la actuación de los operadores del Derecho con la finalidad de alcanzar una finalidad determinada: La concertación del valor justicia.

De esta manera , creemos que se puede afirmar que tomando postura dentro de un tipo de Estado determinado , la finalidad del mismo cambiará; así como el sentido en que deberá interpretarse una misma disposición normativa.

Pues bien, al haber entendido que hubo todo un largo proceso para llegar al Estado del cual nos encontramos hoy en día diremos que la aparición del Estado moderno en su forma primigenia se da en fórmula del Estado de Derecho, que fue a su vez, la respuesta ante el Estado Absolutista, Estado caracterizado por la ausencia de libertad debido a la concentración del poder.

El Estado de Derecho es el posicionamiento de una forma de pensar y organizar la sociedad política y jurídicamente, entendiendo que esa unidad política está basada en el poder que reside en el derecho, el cual es inherente a la persona humana. De ahí se demostró que el poder político concentrado en una persona o en un grupo de personas generalmente resulta su ejercicio como dañino. Pero tampoco cambiaría las cosas si el poder pasará a manos de la mayoría, sino se perpetuaría la lógica de la arbitrariedad sobre los gobernados.

Y es así, como aparece la concepción de que debe ser el poder quien debe estar sometido a los derechos fundamentales de las personas, hecho que se fundamenta en la Teoría de la división y equilibrio de poderes, que si bien es cierto marcaron trascendencia pero no resolvieron del todo el abuso del poder ya que el poder legislativo llegó a sobreponerse a los otros poderes con decisiones arbitrarias centrándose sólo en formalidades , éstas que eran la base de la producción de normas junto a la voluntad expresa del órgano legislativo dejándose de lado a los fundamentos de la Constitución.

Es así como aparece el Estado social de Derecho, como modelo alternativo y reivindicador de los derechos sociales, que tomó en cuenta la Constitución pero no tuvo la fuerza imperativa y normativa necesaria ya que seguía vigente la soberanía parlamentaria del poder legislativo.

A consecuencia de ello nace el Estado democrático de derecho , quien se incorpora a un sistema democrático representativo junto a las instituciones de la democracia (referéndum, iniciativa legislativa y de reforma constitucional , revocatoria, remoción de autoridades, rendición de cuentas, etc). La democracia de representativa y excluyente pasó a ser participativa e inclusiva, pero pese a ello no resolvió las demandas de carencias materiales y espirituales. Por otra parte la Constitución llegó a ser un referente que proyecta valores estableciendo mecanismos para proteger a los ciudadanos, pero no llegó a constituirse del todo.

Luego de todo ello, apareció un Estado que se complementó y superó tanto el principio de legalidad como el de soberanía parlamentaria, presentando principios como el de constitucionalidad y soberanía constitucional. Ese es el Estado en el cual nos encontramos hoy: Estado constitucional y democrático de derecho donde la Constitución adquiere fuerza normativa e imperativa necesarias para ponerse al frente de los órganos estatales, siendo eficaz y constituyéndose en la fuente de los sistemas político, económico y jurídico. Es así como la sociedad encuentra en la Constitución un instrumento eficaz para resolver problemáticas de índole social, político, económico y jurídico.

CITAS AL FINAL DEL COMENTARIO

* Alumna de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Inca Garcilaso de la Vega. Coordinadora General del Taller de Investigación “VICENTE MORALES DUÁREZ”.